miércoles, 16 de mayo de 2007

JUEGOS OLÍMPICOS



¿Sabías que desde el año 776 antes de Cristo, aproximadamente tres mil años, ya existía la competencia olímpica en la antigua Olimpia? y ¿sabías que los juegos olímpicos modernos se iniciaron en Atenas en 1896?
Todo comenzó con la coordinación del Barón de Coubertin. Desde entonces las Olimpiadas se realizan cada 4 años, con contadas excepciones (I y II Guerra Mundial). Las olimpiadas modernas han generado un movimiento mundial basado en el deporte y en la sana competencia.

Comienzos

Érase una vez…en la antigua ciudad de Olimpia, Grecia, donde se reunían atletas de diferentes regiones para competir en las diversas modalidades deportivas de la época.
De los atletas se esperaba el mejor papel para orgullo de su ciudad natal. A cambio se les proclamaba héroes, colocándoles una corona hecha de ramas de olivo.
A partir de ese momento la manutención del atleta corría a cargo del municipio por el resto de sus días. La práctica deportiva era realizada sin ropa y con los pies descalzos. Se excluían a las mujeres y les era vetada su participación como espectadoras.

Casi 20 siglos después el barón de Coubertin en un viaje realizado al estadio Olímpico de Grecia, tuvo la brillante idea de reiniciar los juegos.
Hacia el año 1894, el Barón dio origen al movimiento olímpico mundial, al convocar a 14 países creándose el primer Comité Olímpico Internacional (COI), con sede en la universidad parisina de la Sorbona.
En el año 1896 se logró la inauguración de los juegos por el rey Jorge I en el estadio olímpico de Grecia y ante 70.000 espectadores. En ellos participaron 311 atletas de 11 países. Así pasando por París 1900, San Luis 1904, Londres 1908, Munich 1972… hasta Atenas 2004.


Los emblemas: sus orígenes


Los Anillos Olímpicos son el principal símbolo de los Juegos Olímpicos. Está compuesto por cinco aros entrelazados de colores azul, negro, rojo, amarillo y verde.

Los Anillos Olímpicos se remontan a 1913 cuando Pierre de Coubertin informó del símbolo que sería usado para el Congreso Olímpico de París, en 1914.
Estos cinco anillos representan a los cinco continentes que se han unido y han aceptado competir de manera sana. Según el Comité Olímpico Internacional, los Anillos Olímpicos representan la universalidad de los Juegos, basados en la idea de que al menos uno de los seis colores de la bandera Olímpica está en todas las banderas de los países del mundo.

La Bandera Olímpica se iza en todas las Ceremonias de apertura de los Juegos Olímpicos, desde Amberes 1920. Una segunda bandera es utilizada para el Juramento Olímpico de los atletas y jueces.Durante la historia de los Juegos, han existido tres banderas oficiales, las cuales poseen, además, un borde de flecos con los cinco colores y el color blanco


martes, 15 de mayo de 2007

MUNDIAL DE FÚTBOL II



El primer “parto” futbolístico a escala mundial tuvo lugar en 1930 en Uruguay. La decisión de la FIFA de celebrar la primera Copa Mundial en este país no recibió muchos halagos, ya que Europa se encontraba sumida en una crisis económica y la participación en una Copa Mundial al otro lado del océano suponía un largo viaje por mar; además, los clubes se veían obligados a prescindir de sus mejores jugadores durante dos meses. Por ello, se presentaron pocos equipos y jugadores; pero con el paso de los años la competición no tardó en volverse extraordinariamente popular.

La pasión por el mundial contribuyó a que el fútbol se expandiese más allá de sus feudos tradicionales, Europa y Sudamérica, y llegase a África y Centroamérica, Norteamérica, Asia y las islas del Pacífico y de Oceanía.

Maracanazo
Como en toda competición, la gloria tiene cabida exclusivamente para un solo equipo, la mejor selección nacional de futbolistas del Mundo. Y ese privilegio lo ostenta en lo más alto Brasil, país que ha ganado más mundiales, con un total de cinco. Le siguen Alemania e Italia, ambas con tres; Argentina y Uruguay con dos, y Francia e Inglaterra con uno. Por desgracia, España nunca ha logrado llegar a disputar ninguna final, ya que nuestra mejor actuación fue en el Mundial de Brasil de 1950, cuando alcanzó las semifinales de aquel torneo que pasó a la posterioridad por el conocido “maracanazo” donde Uruguay derrotó a Brasil en su feudo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro el 16 de julio ante casi 200.000 personas. Ghiggia destrozó la ilusión de los hinchas locales al marcar el tanto de la victoria (1-2). Pero aparte de la de 1958, ésta fue la única Copa Mundial en la que la selección anfitriona alcanzaba la final y no lograba conquistar el título.
Lástima que España no supiese aprovecharlo cuando tuvo la oportunidad en 1982.

¿Ganará España alguna vez un Mundial de fútbol?

sábado, 12 de mayo de 2007

MUNDIAL DE FÚTBOL



La Copa del Mundo de Fútbol es un torneo de un mes de duración donde se dan cita las 32 mejores selecciones nacionales con sus correspondientes astros del balón. Hoy en día, miles de millones de personas de todo el mundo siguen este evento deportivo, el más popular después de los Juegos Olímpicos.
La participación en un mundial es la mayor aspiración de todo jugador y entrenador. La repercusión mediática que tiene la Copa del Mundo hace que una vez durante cuatro años el mundo se paralice y centre sus ojos en el país sede del evento, en esta ocasión Alemania.
Orígenes
En los años 20, la FIFA, máxima autoridad del fútbol, vio que era necesaria la existencia de una competición que consagrase a la mejor selección del mundo. Así surgió la Copa del Mundo de la FIFA, que se celebra cada cuatro años. El organismo acordó en el Congreso de 1924 asumir la responsabilidad de la organización de los Torneos Olímpicos de Fútbol. El torneo de 1924 tuvo un enorme éxito y contó con la asistencia de más de 60.000 espectadores en la final entre Uruguay y Suiza. El éxito de los Juegos Olímpicos aumentó el deseo de la FIFA de disponer de su propio campeonato mundial. El entonces presidente de la FIFA, Jules Rimet, fue el principal impulsor en la lucha por conseguir los medios necesarios para lograr este sueño. A raíz de una proposición del Comité Ejecutivo, el Congreso de la FIFA del 28 de mayo de 1928 celebrado en Amsterdam decidió organizar un Campeonato Mundial oficial de la FIFA. Aquí es cuando nace la auténtica Copa del Mundo.

miércoles, 9 de mayo de 2007

¡El mejor deporte tiene sabor vallisoletano!



Valladolid puede presumir de muchas cosas. Posee sus encantos y también sus inconvenientes, como todas las ciudades. Pero pocas pueden alardear de tener un deporte de élite cuanto menos envidiable. La capital del Pisuerga goza de una extraordinaria salud en este sentido, y hemos de saber aprovecharlo y disfrutarlo.

El Real Valladolid jugará la temporada que viene en la mejor liga del mundo. El Grupo Capitol hará lo mismo un año más (y ya van 25) en la ACB. El Balonmano Valladolid se ha convertido en un símbolo de la ciudad y en uno de los equipos punteros del balonmano europeo. Los de Pastor se pasean con orgullo por el Viejo Continente luciendo la bandera pucelana.

Pero hay más. Valladolid puede vanagloriarse de ser el centro neurálgico del mejor rugby nacional. El Cetransa El Salvador nos tiene acostumbrados a conseguir más de un título cada temporada, convirtiéndose en el referente de este deporte, y donde gran parte de la plantilla forma el bloque de la selección española. Lo mismo sucede con el CIC Rugby Valladolid, actualmente en horas bajas, pero en lo más alto de este deporte.

Eso a nivel de clubes. Pero a título individual el deporte vallisoletano también tiene actualmente u nivel envidiable. El joven atleta Álvaro Rodríguez ha pasado de ser la promesa del atletismo nacional a convertirse en una realidad incontestable. Ya son muchos los que vaticinan que este chaval de tan sólo 19 años será el sucesor del grandísimo Fermín Cacho. Lo mismo sucede con Mohamed El Bendir. O qué me dicen de Laura López: a sus 18 años, esta nadadora se ha traído una medalla de bronce del Mundial de Natación disputado en Melbourne. Y así un sinfín de nombres: Álvaro Simó en tiro con arco, Ainara Portela en piragüismo, Mayte Martínez…el deporte de Valladolid es inmejorable, ninguna ciudad nos supera, y hay que presumir de este momento. Brindemos por ello.


P.D. Más de uno dice “A mí el fútbol no me da nada”. Probablemente usted no gane mucho dinero con ello. Pero sí lo hace la ciudad. Basta dar un dato: el ascenso del Real Valladolid reportará el próximo año unos beneficios de seis millones de euros. No lo digo yo, lo dice la Asociación de Hosteleros. Tener representantes en lo más alto de las competiciones nacionales es un motivo de satisfacción, dejando al margen si el deporte te resbala o no. Aporta beneficios, y punto. Y seguro que los dueños de cualquier bar de la ciudad ya se estarán frotando las manos con el dinero que van a ganar cada domingo cuando juegue el Real Valladolid.

A tan sólo un segundo

Un segundo para soñar, un segundo de ilusión, de esperanza. No es un segundo cualquiera. Es un segundo interminable, el último instante del partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones. El equipo: el Balonmano Valladolid. El rival: el Flensburg. El lugar: el Polideportivo Pisuerga. 7.000 gargantas apoyaban en todo momento a su equipo, un conjunto que estaba a un gol de colarse entre los dos mejores equipos del continente. Ahí es nada.

El 32-30 del partido disputado en tierras teutonas dejaba la eliminatoria totalmente abierta. Los pucelanos habían vuelto a escribir con letras de oro sus páginas más doradas de su historia. Estar entre los cuatro mejores equipos de Europa ya era todo un sueño. Un sueño impensable hace doce años. Allá por febrero de 1995 el entonces BM Arcos Valladolid contaba con el peor presupuesto de la ASOBAL, llegando los jugadores a estar durante más de 15 días encerrados en los vestuarios del Huerta del Rey como medida de protesta ante los impagos.

Aún siendo el equipo “pobre” de la competición, los vallisoletanos llegaron a tocar el cielo europeo en varias ocasiones, pero hasta cinco finales continentales se fueron al traste. La oportunidad de resarcirse estaba en ese Polideportivo Pisuerga.


Pero los vallisoletanos recibieron el mayor golpe en su historia. Todo se decidiría a través de un penalti, una pena máxima que despertó al Balonmano Valladolid de un bonito sueño europeo. Roberto lanza. Falla. Detiene Beutler. Un duro golpe. ¿Volveremos?